GARABATO ARQUITECTURA
Es una firma especializada en arquitectura e interiorismo que se distingue por fusionar la estética innovadora con la funcionalidad práctica. Nuestro enfoque integral nos permite abordar proyectos, desde la concepción arquitectónica hasta la elección meticulosa de detalles de diseño de interiores, creando espacios únicos y memorables.
Nuestra misión es transformar los espacios en experiencias inspiradoras, reflejando la visión y personalidad de nuestros clientes a través de diseños arquitectónicos y de interiores excepcionales. Buscamos crear ambientes que no solo sean estéticamente atractivos, sino también altamente funcionales y adaptados a las necesidades específicas de cada cliente. En Garabato creemos que cada espacio tiene el potencial de contar una historia única, y trabajamos incansablemente para convertir esa visión en realidad.
INSPIRACIÓN DEL ESPACIO
Buscamos generar un refugio como espacio de contemplación, en donde el tiempo parece detenerse, permitiendo al visitante sumergirse en un estado de tranquilidad profunda y renovadora. Aquí, en medio del caos cotidiano, se encuentra un oasis de paz donde el alma puede encontrar descanso y restauración.
Al ingresar, el espacio nos recibe con una oscuridad reconfortante, envuelto en la suave penumbra que abraza el espacio. Sin embargo, esta oscuridad no es opresiva; más bien, es un lienzo en blanco sobre el cual se proyecta la belleza serena de la naturaleza, con un juego de luces y sombras interesantes generadas por la luz natural que ingresa a través de un ventanal en el cielo.
En el centro de la habitación se encuentra una robusta banca de conacaste, tallada por manos artesanas y desgastada por el paso del tiempo, generando un concepto claro de como el tiempo no se detiene a nuestro alrededor, sino que, al contrario, nos va marcando y moldeándonos en las distintas etapas que vivimos. Su presencia es imponente pero acogedora, invitándonos a tomar una pausa y sumergirse en la tranquilidad que ofrece el entorno. Alrededor, se encuentran dispersos troncos de árboles secos que, al ser cálidos al tacto, emanan la energía de la tierra y la estabilidad del bosque, proporcionando un anclaje en medio de la agitación del mundo exterior.
Por los muros se optó por un revestimiento que hace alusión a la piedra natural de acabado rústico, creando un ambiente de recogimiento y contemplación. Se buscó generar un espacio en donde no se perciban los ángulos de cortes de muros, sino que se convierta en una sola atmosfera que abraza a 2 piezas de espejo con cortes orgánicos. Estos reflejos dan la perspectiva de amplitud y generar una sensación de atemporalidad en el espacio.
El techo está revestido con Barrisol, una membrana translúcida que filtra la luz artificial, difundiendo su resplandor en un suave brillo que baña el espacio con una luminosidad etérea y cálida. A través de esta cubierta, se genera la sensación de ver un atardecer, a pesar de estar en un espacio totalmente interior. Es como si el techo se abriera hacia el universo, recordando al observador su conexión con algo más grande que él mismo. Además, se propuso iluminación indirecta que resalta la tridimensionalidad de los muros. Esta luz debía ser suave y tenue, incrustada en las paredes y el suelo para que parezcan rayos de luz dispersos. Su luz crea un juego de sombras y reflejos que dan vida a la habitación, añadiendo profundidad y misterio a la experiencia de contemplación.
Al ser un espacio de contemplación y reconexión con los sentidos, pensamos en todos los detalles que generen una experiencia sensorial. El sonido de la naturaleza, llena el espacio con melodías tranquilas y ambientales, compuesta especialmente para inducir estados de relajación profunda, se mezcla armoniosamente con los sonidos naturales, creando una sinfonía de calma. Esto, en conjunto con un conjunto de esencias naturales transmitidas por medio de difusores, nos permiten entrar en un estado de paz y serenidad.
En resumen, este santuario de contemplación, oculto entre el bullicio urbano, se erige a modo de refugio para el alma cansada, un remanso de paz en medio del caos cotidiano como un recordatorio sutil, pero concreto de la belleza y la armonía que siempre están presentes en la naturaleza; esto si tan solo nos tomamos un momento para contemplarlas.